¿Qué sería de la media mañana mallorquina sin un buen ‘berenar’? ¿O la media tarde? Pan, embutidos, galletas, frutas, zumos, cereales o yogures… Incluso hay quien se atreve con cañas, un buen vino, tapas, variados y pa amb oli (sí, con su lomo a la plancha, camaiot, sobrasada, queso y botifarró). Son muchísimas las combinaciones a las que da lugar la tradicional merienda insular, ¡eso sí, que no falten el tomate y el aceite!
En nuestro Mercat son muchos los puestos que ofrecen productos de temporada para una buena merienda, además de otras tantas paradas con pequeña barra propia para degustaciones… ¡Incluso de sushi, pescados fritos y pizza casera! Y es que innovar en la cocina y mantener la cultura propia no tiene por qué ser incompatible.
Dicen que el ‘berenar’ tiene sus raíces en siglos pasados, cuando campesinos y artesanos reponían fuerzas con productos del campo, pues vivían largas jornadas de trabajo. Pero las buenas costumbres no se pierden en Mallorca, ya que no hay trabajador que reniegue de una paradita a media mañana para degustar su merienda o niños que reclamen la suya, sea cual sea la hora del día. Pero el ‘berenar’ no entiende de situaciones y hasta turistas de paseo por nuestras ciudades y pueblos se decantan por cumplir con la tradición pagesa.
El resurgir del ‘llonguet’
La isla tiene cultura de embutidos y también, de panes. El pan pagés, el pan blanco y el moreno son tradicionales en la mesa mallorquina. En los últimos tiempos, también se ha reavivado la cultura del llonguet, gracias a campañas populares. Ese panecillo típico de Ciutat, que por supuesto encontraréis en el Mercat, es sinónimo de merienda y bocadillo.
Dos de las cinco comidas del día
Una de las premisas en las que coinciden los expertos a la hora de recomendar una alimentación saludable, es en distribuir las aportaciones energéticas y de nutrientes que ingerimos a lo largo del día en unas cinco ingestas diarias: desayuno, merienda a media mañana, comida, merienda a media tarde y cena. Se aconseja, además, que el aporte de la merienda matutina sea de entre un 20% y un 25%, mientras que la siguiente debería proporcionarnos de un 10% a un 15%.
El ‘berenar’ ideal incluye variedad de alimentos, además de servir para completar las raciones de nutrientes que el cuerpo necesita a diario. Pan con queso, jamón… Una ración de fruta… Unos buenos frutos secos… Vosotros elegís, que seguro lo encontraréis en el Mercat de l’Olivar.